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En estos tiempos de crisis, dónde la forma de vivir, actuar y relacionarnos se ha visto comprometida, es momento de pausarnos y buscar el aprendizaje oculto para así salir de la psicosis colectiva que nos ha llenado de miedos y estrés. A pesar de todo lo negativo a nuestro alrededor, tenemos a varios maestros transmitiendo mensajes de aliento. Aquí, trato de compartir parte de lo que para mí ha sido útil y considero importante para mantener la sanidad mental y tranquilidad espiritual.
Uno de los factores más interesantes de analizar es la simbología que tiene esta cuarentena— el hecho que de forma obligatoria tengamos que quedarnos en casa. Somos tantos alrededor del mundo que estamos confinados a quedarnos en nuestros hogares, en nuestros espacios privados y, en teoría, aquellos lugares donde nos sentimos seguros. Pero, ¿qué significa realmente?
Si te afecta quedarte en casa, ¿qué está pasando dentro de ti? ¿Qué estás procesando en este momento? ¿A qué le huyes? Probablemente la mayoría de respuestas se basen en todo aquello que nos causa miedo o incomodidad.
El lado positivo de todo esto es que, por estar pendientes de nuestro entorno, estamos forzados a vivir en el presente; en el día a día. Tomó una crisis de esta magnitud para que despertáramos y nos esforzáramos por estar en el aquí y ahora. De momento, el trabajo más importante es descubrir y definir cuáles son los temas a resolver para cada uno de nosotros.
Cualquier virus o enfermedad entra fácilmente cuando la mente, el cuerpo y el corazón están disociados o desvinculados. Una conexión armónica y equilibrada entre tu estado físico, mental y espiritual es, sin duda alguna, la mejor herramienta de autodefensa que puedes regalarte.
Es decisión nuestra fortalecernos a todo nivel y decretar con convicción: “No voy a permitir que esto me afecte.” ¡Debemos cortar con los miedos! No hay mejor forma de combatirlos que enraizándonos en el presente, en el aquí y ahora… ¡este es el verdadero reto!
Para que te cueste cada vez menos, mientras lo pongas en práctica constante, te aconsejo lo siguiente:
Aprende a alimentar y mover tu cuerpo en espacios reducidos.
Valora tu cuerpo físico:
Descansando y durmiendo.
Alimentándote de forma más sana (reduce alimentos procesados).
Enraízate con La Tierra a pie descalzo (conecta con la naturaleza).
Reconoce tus miedos, y en lugar de alimentarlos haz algo que te divierta; en especial cualquier tipo de arte o manualidad. ¡Ocupa tus manos y así ocupas tu mente!
Genera una ola de empatía y solidaridad, sin permitir que los factores externos te afecten. Cada quien tiene su proceso, debemos ser considerados y conscientes de ello.
Ten la certeza que al final todo va a estar bien, ¡porque así es! Se trata de separar los miedos del amor para llevarnos, y especialmente mantenernos, en el presente.
Todo está en el leguaje que usamos:
Descanso necesario vs. Pérdida de tiempo
Elijo hacer vs. Tengo que hacer
Convivencia oportuna vs. Cuarentena obligatoria
Nuevas formas de ingreso vs. No puedo generar
¡Es totalmente nuestra decisión! Mi deseo para ti es que esta sea una época de leer y aprender, de soñar, imaginar e innovar, pero sobre todo de priorizar lo que consideras importante. Tengamos fe que, al implementarlo, tendremos la capacidad de ser creadores de nuestra realidad y dueños de nuestro destino. ¡Podemos lograrlo!